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La noche del martes, en el auditorio de Humanidades, se llevó a cabo la segunda conferencia magistral del XIII Encuentro de Derechos Humanos: Re-pensando el Género. La representante de ONU Mujeres México, Ana Güezmes, presentó su ponencia Políticas de Estado para abordar la violencia de género hacia las mujeres. Partiendo de que «la violencia no es un problema de las mujeres sino de la sociedad en su conjunto», la doctora Güezmes presentó datos concretos que sentaron el panorama de la violencia de género, perpetrado mayoritariamente contra la mujer, en Latinoamérica. Estos fueron algunos de los datos presentados:

  • Se estima que el 35 % de las mujeres de todo el mundo ha sufrido violencia física y/o sexual por parte de su pareja en algún momento de su vida. Sin embargo, algunos estudios nacionales demuestran que hasta el 70 % de las mujeres ha experimentado violencia.
  • Se estima que, en prácticamente la mitad de los casos de mujeres asesinadas en 2012, el autor de la agresión fue un familiar o un compañero sentimental, frente a menos del 6 % de hombres asesinados ese mismo año.
  • En 2015, un estudio realizado en la Ciudad de México reflejó que el 90 % de las mujeres comunicó haber sufrido algún tipo de violencia sexual en espacios públicos a lo largo de su vida y la mayoría de los hombres no considera el acoso como violencia.
  • A escala mundial, más de 700 millones de mujeres que viven actualmente se casaron siendo niñas (con menos de 18 años de edad). De estas mujeres, más de 1 de cada 3 —o bien unas 250 millones— se casaron antes de cumplir los 15 años. En la región, se calcula que 1 de cada 4 mujeres se casaron o unieron siendo niñas. Para muchas comunidades, el matrimonio temprano no es violación de derechos humanos.

Con eso dicho, la médico dio sentido a una de sus primeras afirmaciones: «la violencia contra las mujeres es violencia contra la sociedad y contra la convivencia democrática.»

Para la representante de ONU Mujeres México, «hoy, el acceso a la justicia y la lucha contra la cultura de impunidad nos interpela», por lo que es urgente convocar a la acción, sobre todo en nuestra región». De acuerdo con Güezmes, en Latinoamérica «se producen múltiples formas de  discriminación; por ejemplo, la que viven las mujeres por el hecho de serlo, pero también por ser pobres e indígenas, que viven en zonas apartadas carentes de una adecuada protección y distantes del brazo de la justicia», aseguró.

A modo de conclusión, la experta en temas de género y lucha contra la violencia a la mujer pidió «insistir en la aceleración hacia la igualdad sustantiva, como lo marcan los instrumentos normativos de derechos humanos (CEDAW, Belem do Pará), de los compromisos internacionales para el empoderamiento y autonomía de las mujeres y del desarrollo sostenible», afirmó. Finalmente, según la conferencista, «necesitamos fortalecer la armonización, ya que los avances son claramente asimétricos en nuestros Estados. Por último, es la igualdad sustantiva en los hechos el espíritu que nos anima».