Luego de una semana intensa, hoy a las 12:30 p.m. se produjo la Clausura del XIII Encuentro de Derechos Humanos: Re-pensando el Género. El cierre de este espacio para la reflexión y el análisis sobre el enfoque de género, y su aplicación en el ámbito público y privado, se produjo en el Auditorio de Humanidades de la PUCP.
El evento concluyó con la conferencia Los derechos de las mujeres en el Perú: ¿qué tanto hemos avanzado?, a 35 años de la vigencia de la Convención para la Eliminación de Toda Forma de Discriminación (CEDAW). En esta participaron la exministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, e investigadora asociada del IDEHPUCP, Marcela Huaita; la directora del IDEHPUCP, Elizabeth Salmón; y la investigadora senior del IDEHPUCP y especialista en movilidad humana, Cécile Blouin.
A modo de cierre y reflexión de esta jornada intensa, Marcela Huaita, propuso como ruta de trabajo «vincular las recomendaciones de la CEDAW con los retos que asumimos a nivel local». Mientras que Elizabeth Salmón, desde sus comentarios sobre violencia de género durante conflictos armados, fue muy enfática al demandar que se visibilizara la violencia contra la mujer como un fenómeno sistemático en tiempos de paz, que «se exacerba en tiempos de conflicto armados».
Por su parte, Cécile Blouin, miembro del área Académica y de Investigaciones, abordó su balance en torno a la violencia de género y el uso de la Convención, desde fenómenos tan complejos y poco atendidos como lo son la trata y tráfico de personas.
De acuerdo con Blouin, si bien la aprobación del Plan Nacional contra la Trata es un buen indicio de que se quiere trabajar respecto al fenómeno, la falta de «información confiable en materia de trata, el que no exista un sistema único de registro» limita la comprensión y atención efectiva del problema, explicó. Blouin advierte que el trabajo preventivo no se plantea de una forma estratégica ni comprometida con atacar la trata. Para esto deberían atacarse las causas estructurales en torno a la trata. Aspectos respecto al delito y al circuito que este construye son también materia de derechos humanos y, por ende, se deben atender bajo ese enfoque, detalló la especialista.
Hablemos de género y religión
Previa a la mesa de clausura, se presentó la mesa Género y Religión, un espacio de diálogo y conocimiento, para comprender el enfoque de género desde la Iglesia católica: ¿qué discusiones hay entorno al tema?, ¿qué contrapuntos?, ¿qué proponen los especialistas de la fe? En la mesa estuvieron presentes el monseñor Pedro Barreto, actual arzobispo Metropolitano de Huancayo; el sacerdote jesuita, Edwin Vásquez; Carmen Lora, directora del Centro de Estudios y Publicaciones; y el doctor en leyes y defensor universitario de la PUCP, Wilfredo Ardito.
La presentación de la mesa giró en torno a la reflexión. Mientras el monseñor Barreto aseguró que la frase ‘ideología de género’ es retrógrada y de uso político, dijo que «el problema real es la moral, es un problema humano de moralidad que puede resolverse con la misericordia de Dios. Podría pasar también que una persona heterosexual sea inmoral, el problema no se reduce a la práctica homosexual», afirmó.
«Para la Iglesia, todos son bienvenidos. Hay algunas parroquias que acogen a grupos que están en esta tendencia homosexual, partiendo de que no se puede generalizar y hay que ver cada caso en particular. La PUCP debe acoger a todos, pero sin perder la idea de universalidad, católica y pontificia», dijo el monseñor.
La psicóloga Carmen Lora llamó a la reflexión, y explicó como «muchas veces ciertos grupos sociales consideran –erróneamente- que un enfoque de género corrompe la educación y ello es lamentable. Son muchas las voces autorizadas las que consideran que el concepto de género es útil».
Por su parte, el padre Vásquez abordó la discusión desde cómo el concepto género puede, a veces, ser llevado «a una idea negativa de ideologización, que no ve al otro en un plano de igualdad y minimiza el papel de la familia en la sociedad, y homogeneiza, de forma excesiva y forzada, [al plantear] que todas las opciones son iguales y tienen el mismo valor», aseguró. La reflexión del sacerdote jesuita se extendió a un tema clave y complejo: el aborto.
De acuerdo con el padre Vásquez, «otra forma que puede ser vista como una ideología es la trivialización del aborto, en el que el producto del embarazo es visto como un apéndice de la mujer que está a merced de su decisión». Concluyó que «no cabe duda de que la mujer debe decidir sobre su cuerpo, pero valdría reflexionar si se trata de un derecho absoluto».
El defensor universitario de la PUCP, Wilfredo Ardito, cerró la mesa con una presentación casi completamente fotográfica para evidenciar la apertura de la Iglesia católica, desde el papa Francisco, «con relación a los roles de género». Con citas e imágenes de los viajes del Santo Pontífice, Ardito aseguró que el papa «incluso se ha mostrado públicamente en reuniones con autoridades gay, como el primer ministro de Luxemburgo. Esta misma aproximación la ha tenido el papa con las personas trans«, afirmó. Ardito destacó que en el Perú no se hayan formulado respuestas negativas contra Francisco e invitó a seguir para adelante, como lo hemos estado haciendo.
(16/06/17)
