Ir al contenido principal Ir al menú principal Ir al pie de página
Nacional 15 de noviembre de 2016

Nuestra investigadora explicó en qué consiste una política migratoria nacional y los limites que plantean los derechos humanos a la capacidad discrecional de un Estado para establecer las reglas de ingreso y salida del país a personas extranjeras, en particular, el principio de igualdad y no discriminación. También se refirió a los límites que se establecen para la deportación de personas.  En su opinión, los muros son una respuesta de varios Estados para disuadir la migración de personas de distintos países y, en este caso, aclaró que ya existen muros en algunas zonas de la frontera entre Estados Unidos y México, lo que no ha impedido que las personas no puedan llegar a territorio estadounidense. «Las personas deciden migrar por las posibilidades de encontrar trabajo. La construcción de muros no va a generar que las personas abandonen su idea y que busquen otras maneras de acceso, lo que implica mayores riesgos para su salud y para su vida».

Blouin indicó el choque de plantear muros como única forma de disuasión frente a la migración irregular. “El tema de plantear muros genera que se crea que la ‘migración es irregularidad’ o ‘migración es criminalidad’. Entonces, se crea la idea que las personas migrantes traen aportes negativos. Ello es preocupante, porque en vez de tener políticas dirigidas a centrarse en la persona humana, en entender la complejidad de la movilidad humana, mas bien se pretende volver a un Estado totalmente cerrado al otro, que no acepta ninguna persona diferente, extranjera a su territorio”, refirió.

Puedes ver la entrevista a Cecile Blouin en los siguientes videos: