Pese a que varios maestros aceptaron, la semana pasada, retornar a las aulas, la huelga sindical aún no se resuelve a nivel nacional. Con movilizaciones al interiores del país, pero sobre todo en Lima, la crisis en el sector educación se mantiene en desarrollo. Es posible incluso que, a partir de hoy, se amplíen las medidas de protesta llevando a cabo una huelga de hambre liderada por Pedro Castillo, líder de los maestros en huelga.
En esta edición de Tiempo Global analizamos esta crisis con Ricardo Cuenca, director general del Instituto de Estudios Peruanos (IEP). A inicios de mes, el especialista calificó a esta huelga, a través de La Mula, como una de carácter político y no sindical, por lo que recomendaba al Ejecutivo desplegar una estrategia política. Cuenca también considera pertinente trasladar a directores generales del Minedu, para que trabajen directamente en las regiones, principalmente en las que se ha radicalizado la huelga, como en Cusco y Apurímac.
Los mecanismo de sanción (descuentos, despidos, reemplazos) habilitados por el gobierno, sumado a la huelga de hambre con la que amenazan los dirigentes sindicales y maestros, son para el especialista señales de que este paro podría estar llegando a su fin. Sobre el dirigente Pedro Castillo, el director del IEP advirtió que de confirmarse su adhesión al Comité Nacional de Reorientación y Reconstrucción del Sutep (Conare) habría que tener cautela al existir una relación entre Conare y Movadef.
Tras 76 días de huelga, Ricardo Cuenca indicó en Tiempo Global que «hay una lección social y es el del reconocimiento que tienen los profesores en el ámbito político». El especialista recuerda que toda «huelga es válida» al ser una manera de expresarse y abrir el debate. Para Cuenca, el valor de las movilizaciones y protestas de los maestros es «haber puesto a la educación en el debate público».
