Ir al contenido principal Ir al menú principal Ir al pie de página
Notas informativas 25 de junio de 2024

Por Grecia Huanca Lara (*) y Scarlett Huanis Rivera (**)

El jueves 20 de junio de 2024, a las 6 de la tarde, San Marcos se convirtió en el punto de encuentro de cuatro defensoras ambientales, que acudieron desde diferentes regiones del país para dialogar sobre los retos que enfrenta la defensa del territorio en el Perú contemporáneo. 

El evento fue organizado por la Revista Anthropia a propósito de su próximo dossier con el tema “Crisis y futuros del capitalismo: poder, tecnología y medio ambiente”. Reunió a Karen Huere, joven defensora asháninka de la comunidad nativa Waypancuni, en Pichanaki; a Leonela Labra, joven defensora de la provincia de Espinar, en Cusco; a Nélida Ayay, defensora de la comunidad de Porcón, en Cajamarca y a Marisol García, defensora de la comunidad nativa Túpac Amaru, en San Martín. Respondiendo a preguntas propuestas por el comité organizador —el comité de eventos de la revista Anthropia—, compartieron sus experiencias, perspectivas y posturas respecto a la lucha que realizan desde diferentes frentes a lo largo del país. 

Fotografía: Imilla Córdova Chambi – Fotógrafa de la Revista Anthropía

Marisol

“Mi bisabuela me decía: ‘la única lanza que tienes es tu voz’” 

Marisol comenzó denunciando el despojo y el destierro territorial en los pueblos indígenas. Argumentó que, desde su territorio, la creación de figuras legales como las áreas de conservación no solamente restringiría el uso ancestral de los territorios, sino que también invisibilizaría la identidad de su pueblo: “cada sector tiene un nombre, una identidad. Es el espacio vital de las deidades, que cumple un papel importante en nuestra vida”. Recalcó con una metáfora la importancia que tenía para ella y otros defensores el defender el territorio: “Si entra una llamada en este conversatorio que te dice que tu casa se está incendiando, que la están robando, vas a dejar todo para ir a defender. Dejamos todo. […] Lo hacemos pensando en la nueva generación, en ustedes, que son los futuros tomadores de decisiones”. 

Nélida

“La madre naturaleza está pasando lo peor. De ella nos alimentamos, respiramos, de ella bebemos agua. A ella le quitamos su agua, a la que yo llamo su sangre. Pero para los gobiernos es algo inútil”

Nélida enfatizó los impactos que la actividad minera tiene en Cajamarca y en el consumo de agua en todo el departamento. Denunció la responsabilidad que los gobiernos de turno, al tomar acuerdos sin consultar o considerar a la población local, tenían y tienen en la explotación de los territorios. Recalcó, además, el papel de base que el campesinado tiene para el sustento de la sociedad y el contraste que hay entre ese papel y las dificultades que enfrentan para proteger la tierra en la cual trabajan: “los campesinos somos los que sembramos y consumimos. Nosotros tenemos que enfrentarnos a las empresas productoras y al mismo tiempo ver cómo proveemos a las grandes ciudades”. 

Leonela

“Desde nuestras diversas agendas, necesitamos construir una nación que nos permita vivir como peruanos y peruanas”

Leonela resaltó los efectos que la minería extractiva a gran escala ha tenido en Espinar. Recalcó que existe un informe, hecho desde la OEFA, que demuestra que el solo hecho de transportar los minerales puede tener un impacto ambiental. Protestar en contra de la situación en Espinar significa, como es conocido, enfrentarse a la represión del Estado. Incluso en los años de pandemia, según Labra, “nos podía matar el COVID o la policía, daba lo mismo”. Su participación, además, recalcó la importancia de articular las múltiples y diversas agendas de lucha que existen a lo largo de nuestro diverso país: “es necesario entender que el Perú es una nación de naciones”. 

Karen 

“Nos toca descolonizar desde nuestro sentir, nuestro pensar y nuestro hacer, para seguir luchando”

Karen propuso su participación reconociendo la importancia de articular la lucha desde una perspectiva descolonizadora. Desde esta mirada, denunció el daño que la crisis climática hace a la madre naturaleza. Recalcó la importancia de “poner en el centro” a la madre naturaleza, y “luchar porque también sea sujeta de derecho”, como lo formuló en sus propias palabras. Para ello, sería inevitable oponer resistencia a las grandes empresas, que conceptualizan al territorio como una fuente de recursos. 

El evento permitió reflexionar en torno a los múltiples frentes de lucha que se han construido en el Perú contemporáneo. La expansión del extractivismo sustentada por el Estado ha llevado a que muchos peruanos y peruanas organicen formas de resistencia como parte de su vida cotidiana y desde sus espacios y saberes. Escuchar a Marisol, Nélida, Leonela y Karen permitió conocer, desde sus miradas, un poco de lo que es importante que los peruanos tengamos siempre presente.

(*) Coordinadora del Comité Editorial de la Revista Anthropía

(**) Comisionada del Comité Editorial de la Revista Anthropía