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Notas informativas 14 de mayo de 2024

El martes 14 de mayo se realizó el evento virtual “Análisis de los resultados de la pobreza monetaria en el Perú, 2023” organizado por el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) y el Consorcio de Investigación Económica y Social (CIES). El panel de análisis estuvo formado por Javier Herrera, investigador del Instituto para el Desarrollo, Norma Correa, investigadora y docente PUCP, y Fanny Montellanos, viceministra de Políticas y Evaluación Social del Midis.

Según el informe presentado por el INEI, el año 2023 la pobreza monetaria afectó al 29,0% de la población del país, lo que significó el aumento de esta cifra en 1,5 puntos porcentuales respecto al año 2022 (27,5%). En el área urbana la cifra fue de 26,4%, 2,3% más que el año anterior; en tanto que en el área rural fue de 39,8%, lo que significó una disminución de 1,3% con respecto a lo registrado el 2022.

Al respecto, Javier Herrera puso el foco en la pauperización de las ciudades, explicando que la pobreza ahora se ha vuelto urbana, destacando que desde el año 2016 comienza el incremento sostenido de la pobreza en la capital y la disminución de la pobreza rural. “En Lima hay más personas con hambre que en el resto del país: el número asciende a cuatro de cada diez limeños”, señaló. También recomendó tener en cuenta el factor vulnerabilidad, definiendo vulnerabilidad como la posibilidad de un hogar de retroceder y llegar a ubicarse bajo la línea de pobreza. 

Para explicar la pobreza, Herrera consideró los siguientes factores: la inflación que siguió golpeando a los hogares pobres y vulnerables; los programas sociales han tenido una menor contribución para la reducción de la pobreza; y una generación insuficiente de empleo adecuado y disminución del número de perceptores de ingresos por hogar. Así, también descartó que el Ciclón Yaku, el Fenómeno del Niño o las protestas sociales hayan sido factores preponderantes en el aumento de la pobreza en el país.

Norma Correa, por su lado, destacó que es necesario reconocer que el Perú enfrenta un escenario retador para la lucha contra la pobreza, pero que esto no debe convertirse en una excusa para la inacción o la inercia. Siguiendo el camino trazado por Herrera, recalcó que el patrón de la pobreza en el Perú se ha complejizado al ver recrudecer las cifras de pobreza extrema en ámbitos rurales y el aumento de la pobreza urbana. Para contrarrestar esta situación propuso impulsar el crecimiento económico y mejorar el clima de inversiones, los cuales son necesarios para ampliar el espacio fiscal para la inversión social y generar empleo, clave para posibilitar una salida sostenida de la pobreza. En ese sentido, puso el foco en el hecho de que las estrategias de superación de la pobreza y los programas sociales han sido diseñados para responder a la pobreza rural.

“Las políticas económicas y las políticas sociales no deben seguir en cuerdas separadas”, dijo en su intervención, titulada “Lucha contra la pobreza: Agenda mínima para acción urgente”, en la cual resumió los hallazgos que se reúnen en el documento de trabajo del mismo nombre elaborado para CIES.

Finalmente, la viceministra Fanny Montellanos, dio una respuesta a los cuestionamientos señalando que desde el Ejecutivo se está trabajando en el rediseño de políticas públicas y programas sociales para buscar una solución al aumento de la pobreza reformulando las políticas de pobreza rural. Finalmente, para poder revertir la situación señaló que el Ejecutivo apostará por la reactivación de la economía, la lucha contra la informalidad y el trabajo consensuado con los gobiernos locales y regionales.