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Nacional 12 de mayo de 2015

Según Montoya, en la medida que el Tribunal Constitucional bolviiano » no haya dispuesto alguna medida cautelar, en la que propongan alguna medida de protección específica a favor de Martín Belaunde, creo que el camino sigue libre para que esta decisión de la justicia suprema boliviana concediendo la extradición se ejecute sin mayor problema”.  De esta manera, la única forma de detener la ejecución de la extradición al Perú será mediante una medida que arraigue a Belaúnde Lossio en Bolivia dictada por el mencionado organismo jurisdiccional de dicho país.

En torno al proceso de repatriación del empresario, el asesor de nuestro Instituto señaló que «una vez aceptada la extradición a pedido del Estado peruano, la ejecución de esta decisión, sin perjuicio de saber cómo tomarán la relación con la acción de inconstitucionalidad –si es que no hay impedimento o una medida cautelar previa– toma que Cancillería se reúna con algunos agentes específicos delegados de Perú en Bolivia, que coordinen la fecha, el momento y la forma en la que Martín Belaunde sería entregado a las autoridades peruanas».

Finalmente, sobre el proceso contra Belaúnde Lossio en Perú, el abogado estimó que demoraría un año el lapso comprendido entre la llegada del extraditado al país y una sentencia de primera instancia.