Ir al contenido principal Ir al menú principal Ir al pie de página

Veinte años atrás, la experiencia de una ciudadana o ciudadano peruano respecto al fenómeno migratorio se limitaba a ser emigrante. Años después, esta coyuntura cambió abruptamente con la llegada de un gran número de migrantes y refugiados desde Venezuela que se vieron obligados a dejar su país debido a la situación política y económica que devino en una seria y hasta la ahora inconclusa crisis humanitaria. Para la población peruana esta situación fue una experiencia nueva. En un principio, prevalecieron la solidaridad, el recuerdo de las propias vivencias como migrantes y el sentido de hospitalidad hacia el extranjero, pero al poco tiempo ello se tornó, en una sector de la ciudadanía, en rechazo y miedo hacia esta comunidad.

Desde la línea de trabajo de movilidad humana, el IDEHPUCP ha desarrollado un minucioso seguimiento de este proceso de migración venezolana en el Perú durante los últimos cinco años desde distintos ángulos. Es así que este estudio se ocupa de los discursos desplegados en medios de comunicación, así como de su rol en la formación de estereotipos y actitudes entre la población peruana hacia las y los migrantes venezolanos, panorama importante porque estos proveen de información a la ciudadanía y porque son actores influyentes en la construcción o en la consolidación de opiniones en torno a los temas que abordan. Adicionalmente, se busca sugerir cómo ciertos métodos en los medios de comunicación que son generadores de exclusión y xenofobia pueden ser adecuados para garantizar un tratamiento ético de las noticias que respete y procure una convivencia pacífica y sana.

Este proyecto se llevó a cabo en una coyuntura especial: a inicios de 2021 la pandemia de la COVID-19 había comenzado a causar sufrimiento y un sinfín de pérdidas económicas y humanas en la sociedad mundial. En este contexto, la comunidad de migrantes y refugiados venezolanos y venezolanas fue afectada particularmente y, por otro lado, en plena pandemia se llevó a cabo la campaña electoral presidencial en la que el fenómeno migratorio fue abordado desde una óptica que dista del enfoque de derechos humanos.