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Notas informativas 8 de marzo de 2019

Querida defensora de derechos humanos y de nuestra memoria:

Te escribe una joven investigadora que por convicción empezó a trabajar temas relacionados con memoria, democracia y posconflicto. Cuando llegué al IDEHPUCP una de mis primeras labores fue analizar la política pública de búsqueda de personas desaparecidas durante el periodo de violencia política. En una de esas entrevistas, conversatorios y foros, posiblemente, nos encontramos y te diste el tiempo de contarme sobre la organización a la que perteneces, sobre ti y sobre qué esperabas del Estado y de la sociedad.

Sabemos que tras treinta años de lucha constante lograste que se aprobara la Ley de búsqueda de personas desaparecidas durante el periodo de violencia, la cual significó el primer paso para introducir el enfoque humanitario que privilegia el encontrar a tu ser querido, lo cual muchas veces te fue negado por una lógica judicial revictimizante. Después, se creó la Dirección General de Búsqueda de Personas Desaparecidas (DGBPD). A partir de ello, por primera vez contamos con una unidad orgánica dentro del Estado con funciones explícitas para resolver esta problemática a nivel nacional. Esta cuenta con oficinas descentralizadas en Ayacucho y Huánuco, y se planea abrir una en Junín. También se presentó el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y Sitios de Entierro (RENADE), que por fin unifica toda la información del Estado, las ONG y las organizaciones de familiares, y nos brindó cifras más reales sobre la magnitud del problema al que nos enfrentamos.

Estos avances no se han logrado solos, sino que son resultado de todas esas acciones de incidencia que organizaste y/o apoyaste. Los familiares de víctimas, liderados por mujeres fuertes y valientes como Doris Caqui, Leonor Sayre, Luyeva Yangali, Rosa Luz Pallqui, Angélica Mendoza, Adelina García, Juana Carrión, tú y muchas otras más, colocaron el tema en la agenda política a pesar de las adversidades, plantearon el enfoque humanitario en el diseño de la política y, hoy, continúan luchando por una implementación adecuada para la búsqueda de personas desaparecidas. Además, las acompañan otras mujeres que asumieron la causa desde su rol como funcionarias públicas, autoridades políticas o representantes de ONG. Esto de seguro lo sabes, pero todas ustedes demostraron que su lucha es legítima y urgentemente necesaria de atender.

Pero este avance resulta tímido cuando miramos el camino que queda por recorrer. Por eso HOY #8M ponemos luz en aquello que falta ver o incluso aquello que aún ni siquiera es perceptible como situación injusta y sobre lo cual necesitamos hablar más, profundizar más, denunciar más, discutir más, para seguir moviéndonos en el camino hacia la equidad.

Para los familiares de víctimas el proceso todavía sigue siendo lento, engorroso y revictimizante. El Estado todavía no interviene en todas las regiones que poseen un número elevado de casos de desaparición forzada como Junín o San Martín. Además, no se ha visibilizado a nuestras mujeres muertas o desaparecidas que representan el 20% de las víctimas del conflicto. Sumado a ello, es necesario que en todos los dispositivos de la política se introduzca el enfoque de género considerando que las mujeres que sobrevivieron sufrieron diversos tipos de vulneraciones a sus derechos fundamentales a través de la violación sexual, tortura, desplazamiento forzado, etc. y que sumado a ello han sido las que principalmente han llevado la bandera de la búsqueda de personas desaparecidas de sus familiares. Ahora, su principal demanda es encontrar a ese 68% de personas que se encuentran con paradero desconocido e incierto, y el Estado debe garantizar que se realice a través de una acción sin daño permitiéndoles su debida participación en los grupos de trabajo y brindándoles atención psicosocial continua y adecuada en el proceso de búsqueda. Finalmente, es necesario que todos y todas reconozcamos sus trayectorias como ciudadanas que buscan justicia y verdad.

Hoy más que nunca, yo, Grace Alicia Mendoza, investigadora del Idehpucp, sigo aquí trabajando por hacer visibles nuestros derechos humanos.