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1 de septiembre de 2020

Escribe: Mónica Liliana Barriga Pérez [1]

Avances en la implementación del plan nacional de búsqueda de personas desaparecidas

Como señalaba en la primera parte del texto, cuando hablamos de avances me refiero a la consolidación de los cimientos del reciente proceso de búsqueda con enfoque humanitario. Como proceso que se diseñó y se está implementando hace tres años requiere de herramientas, protocolos, desarrollo de metodologías de búsqueda y planificación que permita avanzar de forma eficiente y adecuada en brindar una atención integral a los familiares que llevan esperando por más de 30 años una respuesta del Estado. El desafío no es fácil, pues existe tiempo prolongado de espera e incertidumbre por parte de los familiares de las personas desaparecidas frente a una política pública incipiente y novedosa que se viene implementando en diferentes países de la región y del mundo.

Como política pública requiere de la coordinación y articulación de diferentes actores -públicos y privados-, de la voluntad política para su implementación y de presupuesto adecuado que permita el despliegue de las acciones contempladas en el Plan Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas (PNBPD), no obstante, en la realidad son escasos los recursos economicos desde las diferentes instancias del Estado y está situación se agrava con la situación de emergencia sanitaria que enfrenta nuestro país y el mundo.

En este contexto, considero importante hacer un balance de la Dirección General de Búsqueda de Personas Desparecidas (DGBPD) del MINJUSDH a tres años de su creación, resaltando la importancia de consolidar el proceso busqueda con enfoque humanitario como mecanismo de justicia transicional fundamental para la reconciliación del país camino al Bicentenario.

La DGBPD cuenta con cuatro oficinas, la sede central en Lima y tres oficinas descentralizadas, ubicadas en las tres regiones del país que reportan las cifras más altas de personas desaparecidas durante el período de violencia, como son: Ayacucho (9.156), Huánuco (2.779), Junín (2.543)[2], que concentran casi el 70% del total de personas desaparecidas a nivel nacional.

Con el trabajo en equipo de las cuatro sedes se ha logrado brindar 352 respuestas a los familiares sobre el destino final de las personas desaparecidas durante el periodo de violencia. Este número incluye la última respuesta sobre el hallazgo con vida de Wille Castañeda Rivadeneyra y el reencuentro, por ahora virtual, con sus hermanos en Huánuco, que nos permitió revivir la esperanza de seguir hallando personas con vida a pesar del tiempo trasncurrido. Pero también nos reta a implementar estrategias de búsqueda diferenciadas para poder llegar a los diferentes rincones del país.

Las 352 respuestas implican 352 personas desaparecidas y por lo menos el doble del número de familiares que se han beneficiado con la política pública de enfoque humanitario. En todos los casos se ha brindado acompañamiento psicosocial para lograr un efecto reparador y el apoyo material y logístico que ha permitido la participación activa de los familiares. Estas respuestas comprenden desde agosto de 2018 con la primera ceremonia de entrega con enfoque humanitario de 14 personas desaparecidas en Ayacucho[3] hasta julio de 2020 con el primer reencuentro familiar de la familia Castañeda Rivadeneyra.

Además, es importante mencionar que se han brindado durante los últimos 10 meses 116 respuestas parciales, que implican la determinación del destino final de las personas desaparecidas a través de la primera etapa de investigación humanitaria, estableciendo un sitio de entierro por parte del equipo multidisciplinario de la DGBPD, remitiendo el informe respectivo al Ministerio Público para programar la recuperación de los restos humanos. Estos casos corresponden a investigaciones en Huánuco, Junín, Ayacucho y Huancavelica. Y esperamos que las condiciones de emergencia sanitaria mejoren pronto para continuar con la etapa de intervención conjunta y cierre del proceso de búsqueda.

Uno de los primeros y principales avances de la DGBPD ha sido el diseño y creación del Registro Nacional de Personas Desaparecidas y Sitios de Entierro (RENADE)[4], en el cual se centraliza, sistematiza y depura la información sobre las personas desaparecidas durante el periodo de violencia (1980-2000) y nos ha permitido establecer por primera vez en el país una cifra oficial, que en este momento corresponde a 21,793 personas desaparecidas con nombre y apellido[5].

En diciembre de 2019 logramos terminar la implementación de los tres módulos de información que se relacionan entre sí, con la información ante mortem y pos mortem, información familiar, información de contexto y la información de presuntos sitios de entierro, toda esta información es útil para planificar las intervenciones de búsqueda humanitaria y avanzar en las investigaciones de gabinete. Además, la información del RENADE se complementa con la información genética del Banco de Datos Genéticos.

«Si bien los avances son significativos somos conscientes que el reto de la búsqueda de las personas desaparecidas durante el periodo de violencia es mayor y que en este momento se están colocando los cimientos para seguir construyendo una política pública sólida que cumpla con la finalidad de dar respuestas a los familiares y satisfacer sus necesidades.»

Cabe señalar que el Banco de Datos Genéticos (BDG) fue creado en septiembre de 2018, mediante Decreto Legislativo 1398, con la finalidad de contribuir a la identificación de las personas desaparecidas durante el periodo de violencia (1980-2000). El BDG es el primer banco de datos genéticos creado en el Perú y en este momento cuenta con 700 perfiles genéticos. En diciembre del 2019 se logró adquirir el sotfware M-Fisys que permite realizar cotejos masivos de ADN e integrar información no genética para el análisis de identificación. Por lo tanto, está herramienta cientifica constituye un gran avance en los procesos de búsqueda con enfoque humanitario y nos pone a la vanguardia en la región.

Este despliegue de investigaciones humanitarias implica un gran número de sesiones de acompañamiento psicosocial para lograr un efecto reparador en los familiares. Se han brindado 5,735 sesiones de acompañamiento a 2,086 familiares de personas desaparecidas, es importante tener en cuenta que los familiares reciben varias sesiones de soporte emocional durante las diferentes etapas del proceso de búsqueda y el acompañamiento se ha brindado con enfoque intercultural en quechua y castellano. Durante el estado de emergencia nacional se continúa brindado las sesiones de acompañamiento no presencial a través de llamadas telefónicas y plataformas virtuales. A continuación, se presenta el detalle:

Cuadro N°1

ACOMPAÑAMIENTO PSICOSOCIAL A FAMILIARES EN INVESTIGACION HUMANITARIA

 (DESDE EL 2017 HASTA 30 DE JULIO) 

AÑOREGIÓNN° FAMILIARES N° DE SESIONES
2017Ayacucho3739
Huánuco22
2018Huánuco8591
Ayacucho292410
Lima3238
Huancavelica182
Junín3335
2019Ayacucho6811850
Huánuco285664
Junín73173
Lima39334
2020Ayacucho273733
Junín29225
Huánuco115424
Lima92715
Total20865735

Fuente: Dirección de Atención y Acompañamiento – DGBPD

Asimismo, se han creado mesas de trabajo regionales y locales en las cuales participan entidades del Estado, familiares y sociedad civil, que tienen como objetivo ser espacios de coordinación, diálogo e información constante en las zonas en las cuales se estan desarrollando investigaciones con enfoque humanitario. El Grupo de Trabajo de actores involucrados en el proceso de búsqueda de personas desaparecidas con enfoque humanitario[6] y las mesas descentralizadas se reunen periódicamente; han sido espacios muy valiosos para la participación activa de los familiares y la articulación interinstitucional, aspectos que han fortalecido el avance en los procesos de búsqueda con enfoque humanitario. En total se cuenta con 21 mesas de trabajo y el Grupo de Trabajo, para un total de 22 espacios de coordinación y participación.

Cuadro N°2

MESAS DE TRABAJO

AÑO DE INSTALACIÓNREGIÓNZONA
2018AyacuchoHuamanga
HuancavelicaLircay
HuanucoLeoncio Prado
2019AyacuchoVinchos
Acocro
Acosvinchos
Huanta
Huamanga
Accomarca
Huancavelica 

Churcampa

PascoTiclatayan
JunínHuancayo
Satipo
Río Negro
Río Chari
HuánucoHuánuco
Huarín
Monzón
Pozo Rico
Alto Cuchara
Cachicoto

Fuente: Dirección de Atención y Acompañamiento – DGBPD

También se han firmado convenios de cooperación interinstitucional con instituciones estatales y de la sociedad civil que ha permitido fortalecer el intercambio de información y trabajo coordinado entre los diferentes actores del proceso de búsqueda con enfoque humanitario. Además, son un mecanismo para reconocer el trabajo de las organizaciones de familiares y de la sociedad civil para sumar esfuerzos al trabajo de búsqueda humanitaria. Las instituciones con las cuales se han firmado los convenios son: COMISEDH, EPAF, CAPS, APRODEH, ANFASEP, Ministerio Público – Fiscalía de La Nación, Ministerio del Interior, Gobierno Regional de Ayacucho y Gobierno Regional de Huánuco.

Si bien los avances son significativos somos conscientes que el reto de la búsqueda de las personas desaparecidas durante el periodo de violencia es mayor y que en este momento se están colocando los cimientos para seguir construyendo una política pública sólida que cumpla con la finalidad de dar respuestas a los familiares y satisfacer sus necesidades. En este momento se necesita seguir sumando esfuerzos e instituciones que coadyuven al proceso de búsqueda con enfoque humanitario. Además, por supuesto, de la voluntad política y el presupuesto necesario para sostener una política pública de está envergadura.


[1] Abogada por la Universidad del Rosario (Bogotá, Colombia), Magister en Derecho con mención en política jurisdiccional de la Pontificia Universidad Católica del Perú y Máster en Derecho Constitucional de la Universidad Castilla – La Mancha (Toledo, España). Directora General de Búsqueda de Personas Desaparecidas del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos.
[2] Cifras del Registro Nacional de Personas Desparecidas y Sitios de Entierro (RENADE) que administra la DGBPD del MINJUSDH, información actualizada a junio de 2020.
[3] Se realizó en agosto de 2018 la primera entrega con enfoque humanitario de 14 personas desaparecidas en el departamento de Ayacucho, con el despligue del equipo de la DGBPD a los distritos de San José de Ticllas, Acocro, Vinchos y Cangallo para acompañar a los familiares de las personas desaparecidas hasta el velatorio e inhumación en el lugar escogido por las familias.
[4] El RENADE cuenta con información de bases de datos preexistentes de entidades públicas y privadas relacionadas al proceso de búsqueda. Se ha sitematizado información de la Comisión de la Verdad y Reconciliación (CVR), del Registro Único de Víctimas (RUV), del Registro de Ausencia por desaparición forzada de la Defensoría del Pueblo, información del Sistema Interamericano de Derechos Humanos, información de la Base de Datos Ante Mortem de Equipo Peruano de Atropología Forense (EPAF), la Lista de personas desaparecidas de ANFASEP, además, de la información nueva que recoge el equipo de la DGBPD – MINJUSDH.
[5] Recientemente se aprobó la Directiva para normar la administración del RENADE mediante Resolución Viceministerial Nº 003-2020-VMDHAJ, documento que permite realizar una adecuada gestión de la información y detalle como se ingresa y depura la información que almacena el registro.
[6] El Grupo de Trabajo de actores involucrados en el proceso de búsqueda de personas desaparecidas con enfoque humanitario (1980-2000) se creó mediante la Resolución Ministerial Nº 373-2018-JUS. Actualmente, se encuentra en trámite para renovar la vigencia del Grupo de Trabajo. Sin embargo, es importante resaltar que este trámite no ha afectado la periodicidad de las reuniones.