Según indicó el diario La República, la decisión fue tomada sin consultar previamente con la presidenta de la Sala Penal Nacional, Inés Villa Bonilla, quien pidió la reconsideración de la decisión, pues se afectará el avance de diversos procesos judiciales en trámite.
La decisión del Consejo Ejecutivo del Poder Judicial contempla que los tres magistrados pasen a despachar en alguna de las Salas Penales de la Corte Superior de Justicia de Lima. Sin embargo, deberán concluir con los juicios orales en los que venían participando en la Sala Penal Nacional.
Si bien esta fórmula evita el quiebre de los procesos, entraña dificultades logísticas para continuar con los juicios en curso, en particular, en torno a los horarios en que deben realizarse las audiencias.
Tanto Vidal La Rosa como Loli Bonilla veían casos de derechos humanos y de corrupción, mientras que Cavero presidía un colegiado sobre criminalidad organizada. Aun no se nombran a sus reemplazantes.
