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7 de noviembre de 2023

Por Pedro Junior Calvay Torres (*)

El conflicto árabe-israelí es un prisma a través del cual se examinan críticamente los contornos y la resiliencia del Derecho Internacional y de los Derechos Humanos. Este conflicto ha persistido por más de un siglo, y su complejidad ha influido significativamente en la interpretación y aplicación del Derecho Internacional en varios aspectos fundamentales que hoy vuelven a actualizarse con la inminente represalia del ejército de Israel por los actos terroristas cometidos por el movimiento terrorista Hamas en octubre de 2023.

Soberanía territorial y autodeterminación

El concepto de soberanía territorial es central en las relaciones y el Derecho Internacional. El establecimiento del Estado de Israel en 1948, seguido por las guerras de 1948, 1967 y 1973, y la consiguiente ocupación de territorios, ha planteado interrogantes sobre la legalidad de la adquisición de territorios por la fuerza. La ONU ha emitido numerosas resoluciones, incluida la Resolución 242 del Consejo de Seguridad, que pide la retirada de territorios ocupados y respeta la soberanía territorial de todos los Estados. Sin embargo, las disputas sobre las fronteras y la legitimidad de los asentamientos israelíes en territorios ocupados siguen siendo un punto de fricción, que desafía los principios de autodeterminación de los pueblos y la integridad territorial y que incluso se han planteado como pretexto para los recientes acontecimientos ocurridos en Gaza.

Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario

Las condiciones de los palestinos, particularmente en áreas como Cisjordania y la Franja de Gaza, han llevado a acusaciones de violaciones graves de los derechos humanos y del Derecho Internacional Humanitario. La respuesta internacional a tales situaciones ha puesto a prueba la capacidad del Derecho Internacional para proteger los derechos humanos en conflictos prolongados, más aún cuando ambas partes enfrentadas en dichos conflictos no respetan completamente esas regulaciones. Los informes de organizaciones de derechos humanos y de las Naciones Unidas han documentado violaciones que incluyen el uso excesivo de la fuerza, detenciones arbitrarias y restricciones a la movilidad en zonas como la Franja de Gaza.

El dilema de los refugiados

El problema de los refugiados palestinos y su derecho de retorno, consagrado en la Resolución 194 de la Asamblea General de la ONU, es un asunto complejo y emocional. Aunque el Derecho Internacional reconoce este derecho, la implementación práctica ha sido esquiva y ha contribuido a la continua diáspora y sufrimiento de los refugiados palestinos.

Uso de la fuerza y proporcionalidad

El uso de la fuerza por parte de Israel y las respuestas de grupos palestinos han generado debates sobre la legalidad del uso de la fuerza y las normas de proporcionalidad. Las operaciones militares en Gaza, por ejemplo, han sido criticadas por la comunidad internacional cuando se perciben como desproporcionadas en comparación con la amenaza enfrentada, lo cual está regulado por el Derecho Internacional consuetudinario y tratados como los Convenios de Ginebra.

El papel de las instituciones internacionales

Las organizaciones internacionales, principalmente la ONU, han jugado un papel central en la mediación del conflicto. Sin embargo, la eficacia de la ONU se ha visto obstaculizada por acusaciones de parcialidad y por el uso del poder de veto en el Consejo de Seguridad, lo cual ha socavado la percepción de neutralidad y justicia de la institución. Este hecho se ha visto latente en las declaraciones recientes hechas por Israel exigiendo la renuncia del secretario general de la ONU por presuntamente presentar opiniones a favor de palestina.

Reconocimiento de Estados y división internacional

La cuestión del reconocimiento de Palestina como Estado y su membresía en organismos internacionales ha creado división internacional, pero con el paso del tiempo se ha ido consolidando la necesidad de consolidar la consolidación de un Estado Palestino. Esto refleja la complejidad del proceso de reconocimiento de Estados en el Derecho Internacional y demuestra cómo el conflicto árabe-israelí puede influir en las relaciones diplomáticas a nivel mundial.

Acuerdos internacionales y su cumplimiento

Desde los Acuerdos de Oslo hasta los acuerdos de Abraham (2020) se han tratado de establecer marcos para la paz y la cooperación. Sin embargo, la implementación inconsistente de estos acuerdos ha cuestionado la fuerza vinculante del Derecho de tratados y la responsabilidad de las partes. La inminente guerra por estallar en gaza detendrá todo lo avanzado por Israel y algunos países árabes en el afán de normalizar sus relaciones diplomáticas y consolidar una agenda común para la paz.

El conflicto israelí-palestino de 2023 ha resaltado las tensiones y desafíos en el Derecho Internacional de los Derechos Humanos. La inesperada escalada del conflicto en octubre, con ataques sorpresa, represalias y un alto número de bajas civiles, evidencia las limitaciones del marco legal existente para manejar conflictos de esta magnitud. Esta continua evolución del conflicto y su interacción con las normas internacionales subraya la imperante necesidad de un Derecho Internacional más adaptativo, dinámico y eficaz en la protección de los derechos humanos, así como en la promoción de la paz y la seguridad internacionales.

(*) Magíster en Derechos Humanos y doctorando en Derecho Público de la Universidad Nacional de Mar del Plata.